Los muebles Montessori son tendencia
Hoy en día los padres se preocupan muchísimo más de la educación de sus hijos. La quinta de padres que están ejerciendo hoy en día este papel, quieren conseguir ciudadanos resolutivos y también comprometidos. No es de extrañar que Montessori sea tendencia tanto por lo que se refiere a su filosofía como por su estilo a la hora de educar a los más pequeños.
Pero todavía hay muchos padres que creen que Montessori es solo un método pedagógico para colegios. Nada más lejos de la realidad. Este método se lleva a cabo fuera y dentro de casa y los muebles y distribución de la habitación tienen una gran importancia para conseguirlo. Descubre cómo:
Descubre el mobiliario Montessori imprescindible para poner en marcha el método en casa
Las camas Montessori
Las camas montessori son perfectas para los niños porque permiten que tengan una gran autonomía e independencia y que, además, los padres puedan estar tranquilos.
Para los peques que comienzan a dormir solos, esta camas están a ras de suelo, sin patas, de modo que el pequeño puede subir y bajar cuando le plazca y, además, si se cae es mucho menos peligroso por lo que no necesita barreras.
Estas camas tienen otras ventajas, por ejemplo el tener formas divertidas que hacen que los niños puedan jugar y pasarlo muy bien en su cama, estimulando su imaginación. Incluso pueden tener un techo que les hará de estímulo para dejar volar su imaginación.
Estanterías Montessori
Las estanterías Montessori están pensadas para que los peques de la casa puedan coger sus cosas cuando lo deseen sin riesgos y sin tener que solicitar ayuda. Por ese motivo se sitúan sobre el suelo, donde son absolutamente accesibles.
Fomentan también la costumbre del orden, porque de igual manera que el peque de la casa puede coger sus cosas, también puede volver a acomodarlas una vez que acaba de jugar. Si junto a la estantería se colocan un par de cestas, se hará mucho más sencilla su labor.
Una habitación a la medida del peque
El método Montessori apuesta por una habitación a la medida del peque, que estimule su imaginación y a la vez le invite a poner en práctica todo lo que va aprendiendo. Por eso, el niño necesita que su habitación esté pensada para él y que no haya nada que no pueda tocar o con lo que se le prohíba jugar.
No se trata de no poner límites al niño, pero sí de que su espacio propio en la casa sea seguro y apropiado para él de modo que pueda desarrollar su independencia y personalidad. Por supuesto, se trata también de que la habitación se vea bonita. Por eso, los muebles Montessori son tendencia, porque han sabido reunir ambas cosas.