Claves para un uso eficiente del aire acondicionado de tu vehículo
Ahora que empieza el calor sofocante es algo fundamental tener el aire de nuestros coches a pleno rendimiento, por ello debemos asegurarnos que la carga del aire acondicionado es correcta.
Como recomiendan en Taller Autodiésel Valle lo aconsejable es revisar su estado cada año y realizar una nueva carga cada dos.
Pero ¿cómo sabemos si debemos cargar el aire acondicionado de nuestro coche? Muy fácil, si cuando encendemos el aire nos llega un desagradable olor o tarda en regular la temperatura debemos echarle un ojo.
Algunas de las causas más comunes de su deterioro son que el filtro está sucio o taponado, problemas eléctricos o apariciones de fugas de gas.
Generalmente solo nos acordamos del aire acondicionado en situaciones puntuales, cuando hace mucho calor o viajamos, por ejemplo. Lo ideal es mantener todo el año una temperatura de entre 22 y 24 grados y así no forzarlo o encenderlo al menos una vez al mes durante 15 minutos, en caso de que no lo hayamos hecho debemos enfriar el interior del vehículo, abrir las puertas y ventanas y entonces encender nuestro aire.
Un dato a tener en cuenta es que el aire acondicionado enfría mucho mejor cuando el motor está en marcha, por ende, cuanto más rápido vaya, más refrigerará. No es recomendable usarlo con el motor apagado ya que solo servirá para gastar combustible.
Conducir con las ventanillas bajadas y con velocidades superiores a 100 kilómetros por hora dispara el consumo de gasolina, por eso es importante asegurarnos, como hemos explicado, de que nuestro aire funciona correctamente antes de emprender un viaje, así iremos más cómodos y además incluso ahorraremos en gasolina.
Otro consejo para ahorrar combustible usando el aire es que cuando éste alcance la temperatura ideal activemos la entra de aire exterior. Se estima que el consumo puede elevarse entre un 5% y un 20%, lo que en la práctica se traduce como un par de décimas hasta un litro cada 100 kilómetros y en ocasiones, dependiendo del vehículo, podemos incluso notar una ligera disminución de la potencia del vehículo.
Mantener un correcto estado del aire acondicionado de nuestro vehículo nos puede ahorrar malos tragos durante un trayecto, evitar la fatiga y no desperdiciar combustible.
Siempre que se pueda es recomendable aparcar el coche en un garaje o al menos a la sombra en la calle con un parasol, evitando que el espacio interior esté demasiado caliente y que nuestro aire no tenga que trabajar en exceso.
Revisar su estado y realizar su carga cuando proceda es fundamental, no debemos esperar a última hora para hacerlo, mucho más en estas fechas en las que el calor hace acto de presencia y los viajes por carretera están a la orden del día.